250g de mantequilla
200g de azúcar glas
500g de harina de repostería
1 huevo grande
Extracto de vainilla
Una cucharadita de leche
Preparación:
Mezclamos el azúcar con la mantequilla y batimos. Una vez que la textura sea cremosa, incorporamos los huevos y seguimos batiendo. Añadimos la esencia de vainilla y la cucharadita de leche. Vamos agregando la harina, poco a poco a cucharadas, batiendo bien mientras se incorpora. Formamos una bola de masa y la dividimos en dos. Colocamos una sobre papel de horno. Amasamos la bola hasta conseguir una lámina de masa del mismo grosor.
Una vez estirada, cubrimos la masa con otro papel de horno y la metemos en la nevera. Repetimos desde el paso 6 con la otra mitad de la otra bola de masa y la colocamos sobre la anterior. Las guardamos en la nevera durante 15 minutos. Sacamos una lámina y vamos cortando galletas colocándolas sobre una bandeja con papel de horno. Horneamos a 180ºC durante 15 minutos o hasta que se empiecen a dorar los bordes. ¡Cuidado con este paso! Ya que en el mínimo despiste se te pueden quemar. Sacamos del horno y las dejamos reposar 5 minutos en la bandeja antes de traspasarlas a una rejilla enfriadora. Para decorarlas, podéis utilizar glasa real o fondant. O simplemente hacerles un agujerito antes de hornear y hacerlas dobles, rellenas de nutella o mermelada.
Fuente: Instinto repostero
No hay comentarios:
Publicar un comentario